El aire de la música flamenca de las obras de Manuel de Falla inspira a su vez la obra de Pablo Despeyroux, obra en la que se utiliza el recurso del looper como elemento de continuidad y además se narra el poema: El Ladrón del agua. Por su parte, los Preludios Epigramáticos (1981-1983) de Leo Brouwer inspirados en versos de Miguel Hernández, cuya presencia viene justificada porque no fue sino Juan Ramón quien consagró al de Orihuela tras haber leído su Elegía a Ramón Sijé. Y por último se interpretarán movimientos de Platero: el Platero de Mario Castelnuovo-Tedesco. En 1960, cuando el poeta ya había recibido el Nobel, este compositor italiano de ascendencia judía terminó de componer Platero y yo Op. 190, veintiocho piezas para guitarra y narrador, que se agrupan en cuatro volúmenes de siete movimientos cada uno, y que plantean cuatro itinerarios distintos a través del texto.

La obra debía haber sido grabada por Andrés Segovia y el actor José Ferrer, pero el guitarrista solo llegó a registrar una selección de piezas sin narrador. En este momento podrán escuchar como en esta obra la música presenta una íntima conexión con el texto.